El Parlamento Europeo ha publicado recientemente los resultados de su Encuesta sobre Juventud del Eurobarómetro 2024, un informe que recoge las opiniones, prioridades y preocupaciones de más de 25 000 jóvenes de entre 16 y 30 años en los 27 Estados miembros de la Unión Europea. Este estudio, además de arrojar luz sobre las tendencias informativas y los hábitos de los jóvenes, pone el foco en los temas que consideran fundamentales para su presente y su futuro.
Preocupaciones económicas y sociales: el coste de la vida, protagonista
Una de las principales conclusiones del Eurobarómetro es la clara preocupación de la juventud europea por su situación económica. El 40 % de los encuestados sitúa el aumento de los precios y el coste de vida como su inquietud más importante, seguida por el cambio climático (33 %) y la situación económica general, incluida la creación de empleo (31 %).
En el caso de España, esta tendencia se acentúa: los jóvenes españoles identifican la creación de empleo (41 %), la vivienda (35 %) y el aumento de los precios (35 %) como prioridades que deberían guiar las políticas europeas en los próximos cinco años.
Estas cifras ponen de manifiesto un deseo claro de que la UE no solo se enfoque en los grandes desafíos globales, sino también en los problemas cotidianos que afectan directamente la calidad de vida de los jóvenes. La presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, lo resumió de forma contundente: «Estas son preocupaciones que debemos abordar en cada decisión que tomemos y en cada ley que aprobemos. De lo contrario, corremos el riesgo de perder a una generación desilusionada».
Redes sociales, el nuevo canal informativo dominante
El modo en que los jóvenes se informan sobre la política y la actualidad también ha experimentado cambios notables. Las redes sociales se consolidan como la principal fuente de información para el 42 % de los encuestados, superando a la televisión (39 %), especialmente entre los jóvenes de 16 a 18 años. En España, esta tendencia es aún más marcada: el 49 % recurre a redes como Instagram y TikTok para informarse, frente al 44 % que opta por la televisión.
Instagram (47 %) y TikTok (39 %) destacan como las plataformas más utilizadas, mientras que X (antes Twitter) apenas alcanza un 21 % de uso.
Los jóvenes cada vez más alerta con la desinformación
La desinformación se ha convertido en una preocupación transversal entre los jóvenes europeos. El 76 % de los encuestados cree que ha estado expuesto recientemente a noticias falsas, y, aunque el 70 % confía en su capacidad para detectarlas, solo una pequeña parte (15 %) se siente «muy segura» al respecto. En España, un 51 % afirma enfrentarse con frecuencia a este fenómeno y un 67 % se considera capaz de identificar contenidos engañosos.
Esta percepción se combina con una mayor conciencia de los riesgos que entraña la desinformación para la democracia. Más de un tercio de los jóvenes europeos (34 %) considera que la información falsa es una de las principales amenazas para el sistema democrático.
Visión del futuro y compromiso con la UE
A pesar de las dificultades, la mayoría de los jóvenes europeos mantiene una visión esperanzadora sobre el futuro de la Unión. El 61 % se declara optimista, una cifra que en España se sitúa en torno al 56 %. La libertad de movimiento dentro del territorio europeo (32 %) se considera el mayor logro de la UE, seguida por la solidaridad entre países miembros (28 %) y el compromiso con los valores democráticos (25 %).
En cuanto al interés por participar en la vida pública, el 67 % de los jóvenes europeos declara estar dispuesto a implicarse en diálogos sobre el futuro de la Unión. Este compromiso se verá reflejado en eventos como el EYE2025 (European Youth Event), que tendrá lugar en Estrasburgo en junio y reunirá a miles de jóvenes para debatir propuestas e ideas.
Una juventud europea cada vez más involucrada
El Eurobarómetro de Juventud 2024 dibuja un retrato claro de una generación consciente, crítica y comprometida. Los jóvenes europeos tienen preocupaciones concretas (como el coste de vida, el empleo o la desinformación), pero también mantienen una actitud constructiva hacia el futuro y hacia la Unión Europea. Es por esta razón que es imprescindible integrarlos en el proceso de toma de decisiones, para responder adecuadamente a sus necesidades. Esto no es solo una cuestión de justicia generacional, es una condición esencial para el fortalecimiento de la democracia y la cohesión europea.
